Las arañas vasculares o telangiectasias son esos pequeños capilares dilatados que se localizan justo debajo de la piel. Estas “venitas” no suponen un problema para la salud pero sí tienen unas connotaciones estéticas, especialmente cuando aparecen en zonas muy visibles como es la cara.
Las arañas vasculares suelen aparecer en las zonas de las mejillas y alrededor de la nariz, tiene una apariencia muy fina y no son dolorosas.
¿Qué causa la aparición de telangiectasias?
Las arañas vasculares se producen debido a que la vena reticular que se divide en los vasos capilares falla por una insuficiencia valvular a dicho nivel. Esto da lugar a un aumento de presión local lo que provoca una dilatación de los capilares. Entonces los capilares se llenan más de sangre y se ven por transparencia a través de la piel.
Las causas principales de que las arañas vasculares aparecezcan son la herencia genética y los estrógenos en la mujer. Aunque existen otros factores como:
- Obesidad.
- Sedentarismo.
- Los anticonceptivos orales.
- Alteraciones hormonales.
- Fragilidad en las venas.
- Presión sanguínea excesiva.
- Haber recibido un golpe fuerte.
- Dieta incorrecta.
- Hipertensión arterial.
- Factores genéticos.
- Embarazo.
- Abuso del alcohol.
- Estreñimiento.
- Consumo de ciertas drogas y medicamentos.
¿Cómo se pueden eliminar las arañas vasculares del rostro?
Las arañas vasculares se pueden eliminar a través de la Luz pulsada o del láser.
En Clínica Dermatológica Huelvaderm disponemos del Lumenis One, que es capaz de tratar los problemas de rosácea, cuperosis y arañas vasculares faciales que además se puede aplicar sobre la piel de la cara, el cuello e incluso del escote..
Lumenis one consta de una luz pulsada para tratar la rosácea y telangiectasias y un láser de Neodimio que también sirve para eliminar las telangiectasias.
Es un tratamiento personalizado donde se selecciona la profundidad y la intensidad del Neodimio-Yag dependiendo del tipo de piel y la zona a tratar. Es un método rápido y los resultados se pueden observar casi desde la primera sesión. Se consigue así que las lesiones vasculares vayan desapareciendo de manera progresiva y constante, sin interrumpir la vida social y laboral del paciente. El número total de sesiones dependerá del tipo de lesión y de las características propias de cada paciente.
Lo único a tener en cuenta es que en ocasiones el tratamiento con láser neodimio-yag puede resultar un poco dolorosos y que requiere de unos cuidados mínimos (uso de cremas, protección solar, etc..) después de cada sesión.