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Dentro de las enfermedades de la piel, el Xeroderma Pigmentoso es una enfermedad genética poco frecuente que se hereda dentro de familias con padres que son portadores del mismo.

Esta enfermedad está estrechamente relacionada con otras afecciones graves y requiere del paciente un cuidado activo de su salud dérmica durante toda su vida.

¿En qué consiste?

Los pacientes que sufren Xeroderma Pigmentoso tienden a tener hipersensibilidad a la radiación ultravioleta, más facilidad para quemarse con poca exposición al sol, fotofobia solar, aparición de efélides o pecas y otras afecciones como queratosis, carcinomas basocelular, y melanoma maligno.

 

¿Cómo se puede tratar?

El tratamiento de esta afección de la piel está basado en un diagnóstico temprano de la enfermedad, una protección férrea contra la radiación ultravioleta durante toda la vida (gafas de sol, pelo largo, mínima exposición solar durante el día) y la detección y tratamiento tempranos de los diferentes tumores que vayan apareciendo, todo ello mediante autoexploración y revisiones dermatológicas.


Pese a ser una enfermedad rara que solo sufren uno de cada millón de habitantes, el Xeroderma Pigmentoso es una seria afección de la piel que requiere un diagnóstico temprano y una ayuda profesional adecuada que sirva para que el paciente disfrute de una piel saludable durante toda su vida.